¿Qué hago primero: ahorrar o pagar mi deuda?

Si bien es importantísimo tener un sistema de ahorro, NO debemos dejar a un lado el pago de nuestras deudas. Pero, ¿Qué hacemos primero?, ¿Pagamos primero las deudas que tenemos antes de ahorrar? ¿O es mejor dedicarnos a ahorrar para asegurar nuestro futuro y pagar las deudas poco a poco con el dinero que nos queda?

¡En este post te ayudamos a evaluar tus opciones!

Opción 1: Pagar toda la deuda primero, antes de ahorrar (o incluso usar tus ahorros para salir de tus deudas)

Esta decisión es la que parece más lógica desde el punto de vista financiero: la deuda nos cuesta mucho dinero (generalmente las tasas de interés son muy altas) y no hay una cuenta de ahorro, y probablemente tampoco una de inversión conservadora, que genere una tasa de retorno por tu dinero igual a la que tú estás pagando por la deuda. Es decir, estarás pagando por la deuda más de lo que estarás generando con el ahorro. Además, enfocarte en pagar tus deudas antes que ahorrar te ayudará a reducir el capital final a pagar. Es por esto que muchos asesores financieros recomiendan deshacerse de la deuda antes de continuar ahorrando.

La desventaja es que si primero pagas tu deuda y no pones dinero en ahorros (digamos en un fondo de emergencia), no tendrás fondos a los cuales recurrir si tienes una situación difícil. Ya sea que tengas un imprevisto pequeño o hasta emergencia médica, si no tienes nada ahorrado lo más probable es que termines volviéndote a endeudar para afrontarlo. Usar tus tarjetas de crédito o un préstamo personal para financiar una emergencia solo hará que sea más difícil pagar tu deuda.

Otra desventaja de no tener nada ahorrado, es que dependiendo del momento en el que te encuentres en tu vida, dejar los ahorros completamente de un lado puede hacer que no tengas suficiente dinero para el retiro. Mientras más cerca del retiro estés, menos lo puedes descuidar.

Opción 2: Ahorrar sin pagar la deuda (o sólo pagando el mínimo)

Si priorizas el ahorro, estarás preparada ante cualquier eventualidad. Además, si decides comenzar a invertir parte de esos ahorros, tendrás los beneficios del interés compuesto desde más temprano. 

La desventaja es que si solamente ahorras y no te enfocas en pagar tu deuda, pagarás más dinero con el tiempo ya que los intereses irán haciendo tu deuda más y más grande. Además, no pagar tu deuda lo más rápido posible es restarle flexibilidad económica a tu yo futuro. Por ejemplo, si en unos años decides emprender, o mudarte a vivir a otro país, tener una deuda puede atarte las manos y crear dificultades en estos escenario. 

El otro problema con enfocarte sólo en ahorrar y no pagar tus deudas es que corres el riesgo de llegar a la jubilación con deudas que los ahorros de tu jubilación no te alcanzan para vivir cómodamente mientras sigues pagando esta deuda. 

Entonces, ¿qué hacer? 

Nuestra recomendación es hacer un poco de los dos. El porcentaje que pagas o ahorras depende de muchas cosas. Aquí te dejamos algunos tips:  

  • Bajo cualquier escenario, lo más importante es que construyas un pequeño fondo de emergencia. Lo ideal es ahorrar un total en efectivo en tu cuenta de ahorros equivalente a  3 – 6 meses de tus gastos totales para cubrir cualquier eventualidad. 
  • Concéntrate en pagar primero tus deudas con mayor tasa de interés para que no se vuelvan tóxicas. Es importante tratar de pagar más del mínimo cada mes. En este caso, el monto de ahorro puede ser pequeño pues lo más importante aquí no será  la cantidad sino la constancia de ahorrar. 
  • Si tu tasa de interés es muy pequeña (1%-5%) puedes enfocarte en ahorrar más e ir pagando la deuda más lentamente.  
  • Siempre recuerda no descuidar las metas a largo plazo por mucho tiempo. 
  • Muy importante: siempre recuerda seguir tu presupuesto, organizarte y lo más importante: vivir dentro de tus posibilidades (recortando gastos y sin recurrir a tarjeta de créditos para gastos innecesarios).